Suelos

Jornadas: Sistemas innovadores de regeneración de suelos y mejora de la rentabilidad (este iba a ser el título de esta entrada pero mejor diferenciar título de la jornada del título de lo que yo escribo)

Tuvieron lugar hace unas semanas, de la mano de la Red de Innovación Rural, con la colaboración de Agricultura Regenerativa y la Universidad de Burgos, organizadas por la Fundación Universidad de Burgos, el Instituto Tecnológico Agrario, y la Junta de Castilla y León según el cartel.

Este sitio quiere jugar unas reglas distintas del capitalismo y no hospeda publicidad pagada, pero de alguna manera estas instituciones corrieron con los gastos de traer ponentes excepcionales y los enlaces son en agradecimiento. Aunque para agradecimiento necesario y merecidísimo el que le debemos a Angel de La Despensa. Sin su trabajo no habría sido posible ni la celebración de las jornadas en su conjunto ni la práctica en huerta y en invernadero, pues también es él el motor del proyecto que utiliza parte del terreno de la universidad para investigación y difusión de técnicas de cultivo respetuosas con la vida en la naturaleza.

En otros enlaces pondré las notas y fotos que tomé de varias ponencias. Lo que sigue es mis apuntes de lo dicho en la introducción, a cargo de los hombres nombrados en el cartel en “Inauguración y presentación de la jornada”.

La climatología condiciona el paisaje, los ecosistemas, lo que se puede plantar.

En la provincia de Burgos hay unas 500.000 hectáreas de cultivo. De estas, 400.000 son de de cereales; de estas, 220.000 son de trigo, unas 120.000 son cebada y el resto son de otros cereales; girasol unas 60.000 hectáreas, alfalfa 14.000 y el resto de lentejas.

La superficie ha variado a lo largo de los siglos y no siempre ha sido así. Antes se quemaba el barbecho y en las labores del campo se convivía con la vida salvaje; conejos al cosechar y pájaros al remover la tierra, buscando lombrices (esto es mío, no lo dijo nadie, pero toda persona que estuvo cerca de un tractor hace 40 años lo sabe y venía a cuento).

Los cambios se deben a muchos factores pero el que es fundamental es las necesidades y demandas de la sociedad. Nada tiene que ver la distribución de ecosistemas y cultivos de hace cien años con los de hoy, en un mercado globalizado en el que las materias primas se mueven por todo el mundo y cuya producción se realiza con medios que incorporan nuevas tecnologías.

Nada tiene que ver la producción de hace cien años con la de hace cincuenta en que ocurrió la revolución de los fertilizantes. Hace cincuenta años, con una sociedad que salía de una guerra, la necesidad primordial era producir comida para abastecer a la población; hoy se exige calidad y seguridad alimentaria, trazabilidad de los alimentos, productos ecológicos, agricultura y ganadería sostenibles. [En la agricultura industrial] ahora se usan los “fitosanitarios” y nuevas tecnologías de las que tratan las primeras ponencias de estas jornadas; las demás explicarán sistemas de producción y demandas de una parte de la sociedad. Técnicas de producción más sostenibles que no utilizan tantos fitosanitarios ni abonos minerales y que se están demandando y tienen un mercado cada vez más grande.

La agricultura varía dependiendo de las necesidades, las demandas de la sociedad. En la agricultura y ganadería sostenibles las técnicas de agricultura no dependen tanto de la fertilización y de los productos fitosanitarios sino que intentan recuperar los suelos de una forma más natural para producir alimentos de calidad y a precios asequibles y que a su vez sean rentables para el productor.

La provincia de Burgos se ha ‘parcelado’ para acercar la Red de Agentes de Innovación Rural”, con direcciones agente1bu@innovarural.es agente2bu@innovarural.es agente3bu@innovarural.es etc. Se les puede llamar para pedir más información, jornadas en nuestras localidades, etc.