Indymedia fue un gran proyecto, casi mundial, nacido en Seattle, Va, EE.UU., en 1999. Fue el primer `lugar’, el primer portal de Internet en el que cualquiera que tuviera un ordenador y una conexión a Internet podía publicar sus propias noticias, su propio texto y contenido multimedia.
Incluso cuando la tecnología y la idea fueron consumidas, como lo son la mayoría de las cosas sugerentes, por El Capital (leer myspace, facebook, twitter), indymedia ha mantenido su atractivo permitiendo lo que las grandes corporaciones no hacen: publicar anónimamente, hasta el punto de que todavía hay algunos sitios indymedia en lo que llamamos países occidentales.
La gente detrás de indymedia estaba y sigue estando comprometida con este mito de los derechos humanos y, entre ellos, el de la libertad de expresión y la privacidad de las comunicaciones. Incluso las personas que ya no están detrás de ningún proyecto de indymedia, están ahora detrás de otros proyectos con el mismo espíritu, tal vez, es decir, que para defender derechos humanos, no podemos utilizar las herramientas que están en manos de aquellos que están destruyendo esos derechos humanos.
Es una contradicción comunicarse a través de twitter para preparar la celebración del 20 aniversario de este hermoso proyecto.
El proyecto indymedia se hizo realidad en muchas ciudades y pueblos del mundo, primero mediante reuniones cara a cara y luego a través de listas de correo. Algunas archivadas públicamente, otras, y cada vez más, en privado, especialmente a medida que El Capital veía o vislumbraba la amenaza que planteaba este proyecto. Este sistema de listas de correo organizó a más de mil voluntarios, de manera más o menos efectiva, hasta que El Capital desarrolló herramientas mucho más chulas (y orientadas al ego) (ver las grandes corporaciones arriba) que hacían que indymedia fuera irrelevante a los ojos de sus antiguos millones de usuarios – y luego vinieron las aplicaciones móviles que permitían el uso de estas aplicaciones chulas sin la necesidad de un voluminoso ordenador y de una cámara por separado – todo ello se incrustó en un único dispositivo que cabía en la palma de de la mano.
Así que incluso para aquellos de nosotros conscientes de la privacidad de nuestras conversaciones personales, los teléfonos inteligentes y lo que podías hacer con ellos se convirtió en algo tan genial, que trasladamos la mayor parte de nuestras comunicaciones -ahora llamadas nuestras vidas sociales en línea- a ellos, dejando cosas arcaicas como el correo electrónico encriptado a una fracción de esas comunicaciones, si es que se utilizaba en absoluto. Con el correo electrónico encriptado, hay un número limitado de cosas que puedes hacer. No habrá mucha gente que siga todo lo que tienes que decir si sólo usas correo electrónico encriptado. Una simple mirada a nuestro alrededor nos muestra que la mayoría de las personas nacidas durante estos últimos veinte años ni siquiera necesitan un ordenador, algunos sólo han aprendido a usar Internet en términos de facebook y whatsapp. Veo una imagen similar cuando trabajo con personas mayores de sesenta años.
Así que no es sólo que los teléfonos inteligentes y lo que se puede hacer con ellos es mucho más genial que lo que se puede hacer con el correo electrónico encriptado. Tienes que ir a esa plaza pública porque ahí es donde la gente está dispuesta a moverse. No puedes llevarlos al callejón para inspirarlos en los derechos humanos. El Capital ha hecho que esa plaza pública sea tan brutalmente atractiva tanto para las masas como para los activistas, que no es posible atraernos de vuelta al callejón.
El Capital nos ha alejado de las herramientas de privacidad – seguridad y nos ha llevado a dispositivos chulos e inseguros como los teléfonos inteligentes y ahora, pisando fuerte, los televisores inteligentes.
La encriptación (específicamente, y sin enredarse demasiado en acrónimos, el tipo de tecnología que utiliza el Enigmail de Thunderbird) ha demostrado ser indescifrable en términos de duración de la vida humana. El Capital, o quizás más exactamente el Sistema en el que se basa, ha admitido que no ha sido capaz de romper la encriptación. Así que el siguiente paso ha sido conseguir que sea irrelevante, apartándonos de su uso.
Al mismo tiempo y lugar que el nacimiento de indymedia, fue el nacimiento de riseup como proveedor de correo electrónico. En estos diecinueve años, se han multiplicado los colectivos que proporcionan comunicaciones seguras en al menos dos continentes. Y la seguridad de las comunicaciones que proporcionan algunos de estos colectivos ha mejorado hasta el punto de que los correos electrónicos entre ellos, aunque no estén encriptados con tecnología Enigmail, se encriptan “en ruta”, sin que el remitente ni el receptor tengan que realizar ninguna tarea extra.
El resumen de este artículo en el New York Times (enlace externo) es que Wikileaks recibió y publicó documentos filtrados supuestamente de la CIA detallando formas de acceder a comunicaciones privadas por medio de’hacks’ en aplicaciones como Signal, a mensajes ‘antes’ de ser encriptados, o ‘después’ de ser desencriptados, por lo que la encriptación, en estas aplicaciones específicas, es completamente irrelevante.
Y no es sólo encriptación. Se trata de usar las herramientas incrustadas en El Capital, o usar herramientas creadas por amigos nuestros. Incluso sin usar encriptación, tus comunicaciones con tus amigos, y el proyecto que estás creando con ellos, van a funcionar mejor usando nuestras propias herramientas. Las herramientas del Capital pueden ser más fiables y estables y, por supuesto, más chulas que las nuestras, pero sólo estarán disponibles mientras El Capital nos lo conceda. Con cerca de diez grupos cerrados una semana en promedio por facebook y twitter también cerrando rutinariamente cuentas de orientación política, es la supervivencia de esas comunicaciones lo que está en juego, incluso si nuestros servidores basados en donaciones se desconectan de vez en cuando.
Así que, entre nosotros, activistas veteranos, por favor, continuemos utilizando los servicios seguros de correo electrónico que nuestros envejecientes camaradas siguen manteniendo. Y cuando estemos en la plaza pública, sigamos invitando a la gente a conocer las herramientas que están usando y las que podrían usar.
https://help.riseup.net/en/security/resources/radical-servers
https://we.riseup.net/yellowpages/services
https://github.com/libresh/awesome-librehosters
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