Esto va a sonar tristemente familiar para virtualmente cualquier profesional de servicios públicos en casi toda Europa: recortes, de recursos materiales y humanos (no hay dinero), con aumentos de cargas de trabajo mientras contemplamos grandes inversiones en proyectos mastodónticos.
Según informaciones de la Atención Primaria en La Bureba (enlace a blogspot) ya en enero de 2014 se habla de que en el primer plan de reordenación de 2012, en Briviesca eliminaban 4 plazas de médico. En ese mismo año ya se trasladó una plaza de médico de Briviesca al Centro de Salud José Luis Santamaría, en Burgos, y en 2013 se eliminaron 9 plazas de médico rural: 2 plazas en Aranda Rural, 2 en Belorado, 1 en Briviesca, 2 en Burgos Rural Norte, 1 en Pampliega y 1 en Salas de los Infantes. Más allá, en 2012 también se suprimió la plaza del médico de Zuñeda y fue asumida por el resto de compañeros de su equipo. En 2013 se suprimió otra plaza de médico por jubilación, en este caso la de Oña, que también tuvo que ser asumida por el resto de sus compañeros.
Desde antes de 2012, los profesionales sanitarios están obligados a hacer un número determinado de guardias al año, esto es, quedarse toda la noche en el centro de salud por si ‘pasa algo’ y hay que atender a algún paciente. Desde 2012 es asimismo obligatorio no trabajar al día siguiente de hacer una guardia, pero en el puesto de ese profesional que ha hecho guardia no se pone una persona especifica que lo sustituya, sino que sus compañeros cubren ese puesto, “acumulando” esa carga a su trabajo y al recorrido que tengan ese día. También desde 2012 prácticamente se fue eliminando la contratación de sustitutos para cubrir ausencias, de cualquier tipo, haciendo que los recorridos de esos días también deban ser “acumulados” por el resto de compañeros.
Esta Plataforma sostiene que año tras año se reduce el porcentaje del presupuesto sanitario total dedicado a la Atención Primaria de Salud. En opinión de estos profesionales de la salud, el ámbito asistencial más eficiente es este primer nivel asistencial, pues en él se resuelven más del 85% de los problemas de salud con el 14% del gasto sanitario total. Sin embargo, en vez de optar por invertir en él, desde altas instancias se optó por construir caros hospitales, dotándolos de modelos de gestión privada que los hace resultar, a la larga, más caros todavía.
En consecuencia, el sentimiento en el sector es que paso a paso están arruinando el exitoso modelo de Sistema Nacional de Salud que se implantó en España en los años 80, que estableció la Atención Primaria como puerta de entrada al Sistema, con profesionales formados especialmente para trabajar en ese nivel asistencial, que se dedicaban a curar y prevenir las enfermedades más frecuentes y a promover la salud de la población.
El 12 de febrero de 2014 la Plataforma, arropada por unos 300 burebanos/as, protestaron contra el plan de Reordenación de la Atención Primaria, pues quitaba una enfermera para llevársela a un Centro de Salud urbano, con el argumento de que en nuestro Centro de Salud solo se va de pueblo en pueblo pasando consulta a demanda.
Ese mismo día, algunos integrantes de la Plataforma fueron a la Gerencia de Atención Primaria de Burgos a registrar las 674 firmas que habían recogido hasta ese momento en change.org. dirigiéndolas a la atención del Director General de Asistencia Sanitaria de la Gerencia Regional de Salud. La petición llegó a alcanzar los 788 firmantes y reza:
No eliminen más plazas de profesionales de Atención Primaria en la Zona Básica de Salud de Briviesca.
Plataforma por la Calidad de la Atención Primaria en La Bureba ha iniciado esta petición dirigida a Junta de Castilla y León Gerencia Regional de Salud de Castilla y LeónLa Gerencia Regional de Salud de Castilla y León, como parte del Plan de Reordenación de la Atención Primaria, pretende trasladar una plaza de Enfermería de la Zona Básica de Salud de Briviesca a una Zona Básica de Salud urbana en Burgos, Aranda de Duero o Miranda de Ebro.
En el último año y medio ya se han tomado en esta Zona Básica de Salud las siguientes medidas en materia de reducción de recursos humanos:
– Amortización de 2 plazas de médico.
– Reducción del número de sustituciones por vacaciones y permisos, pasando de cubrir 28 días a cada profesional a solo 4.
– Obligación de “librar las guardias” (no pasar consulta la mañana después de haber tenido una guardia), con la particularidad de que ese día la consulta no la pasa un sustituto, sino otro compañero titular, con la consiguiente sobrecarga asistencial.Estos recortes han hecho muy difícil seguir manteniendo la calidad de la atención sanitaria que prestamos a la población.
La situación en 2014 parecía ser que durante sus vacaciones, los y las médicos tan solo eran sustituidos/as 4 días de los 22 reglamentarios, teniendo que asumir los 18 restantes el resto del Equipo. Ademas, las bajas laborales de larga duración no se sustituían en su totalidad sino tan solo 3 días en la semana en el caso de una enfermera y de 2 días en el caso de una médica.
Con la Reestructuración planeada ese año, 2014, se requería que la enfermera de Cubo de Bureba se trasladara a un centro urbano, teniendo que ser asumida su carga de trabajo (Cubo y pueblos de alrededor) por los compañeros de Los Barrios y Busto de Bureba. Al parecer el objetivo final de Gerencia era/es dejar la zona de la Bureba con 12 médicos y 11 enfermeras, a lo que habría que restar, en ocasiones hasta 3 médicos y 2 enfermeras por librar la guardia y 2 personas por estar de baja; en total 7 profesionales cuya labor habrían de cubrir los 19 restantes. Todo esto en periodo invernal; en periodo estival cada año ocurren las vacaciones de los trabajadores y el aumento de la población en la zona.
En resumen, en aquella época 19 profesionales hacían su trabajo más el de otros 7, pasando consulta diaria, realizando ecografías, Cirugía Menor, monitorización de la presión arterial y demás pruebas funcionales y diagnósticas, así como asumiendo la formación de Médicos de Familia, que pasan 2 meses rotando por nuestras consultas, tanto en Briviesca como en los consultorios locales, y atendiendo en horario de mañana las urgencias, incrementadas por ser una zona considerada como punto negro en nuestras carreteras por la concentración de accidentes en la N-I y AP-1.
Así que ya en febrero de 2014 se sentía en esta comarca que se estaba llegando a una situación límite; al parecer en cualquier pueblo de Castilla y León el médico y el enfermero habituales no pasan consulta la cuarta parte de los días que tienen asignado; ha de hacerlo otro profesional que tiene que atender sus pueblos y los de su compañero ausente. Con lo que la calidad de la atención que presta a personas que no conoce y a las que debe ver deprisa porque esa mañana tiene que ir a 4 ó 5 pueblos más, no puede ser la misma que la que le presta su profesional habitual.
Y entonces llegó la Reestructuración de la Atención Primaria de 2014, que eliminó el 12% de los médicos y el 5% de los enfermeros del medio rural, llegando su momento álgido en el estío, con las vacaciones de los profesionales y la avalancha de veraneantes.
En abril de 2014 los profesionales de la salud de buena parte de la provincia de Burgos sentían que la situación que se vivía era de crisis, que era necesaria una reordenación en la Atención Primaria en el medio rural, pero sin disminución de plantillas, y teniendo en cuenta la excepcionalidad de determinadas épocas del año. Se apreciaba un problema de disponibilidad de sustitutos que se percibía como consecuencia de la política de contratación mantenida durante años, provocando el éxodo anual de profesionales. Existía la preocupación seria de que la situación insostenible pudiera causar algún hecho grave en relación con esta situación y como consecuencia de esta política de recortes.
En mayo de 2014 la Plataforma por la Calidad de la Atención Primaria en La Bureba hizo entrega de un escrito al Procurador del Común de Castilla y León, citando las diferentes normas en materia de recursos humanos que la Junta de Castilla y León llevaba aprobando desde 2012 y que ya habían empeorado la calidad de la Atención Primaria de Salud en zonas rurales, y que habían tenido como consecuencias, entre otras, la implantación del “descanso postguardia” (la obligación de descansar 12 horas después de haber trabajado 24, asumiendo el resto del equipo la carga de trabajo, añadiéndola a la ya existente), la reducción de las contrataciones de sustitutos, las jubilaciones forzosas de profesionales y amortización encubierta de sus plazas, y la reducción de profesionales del medio rural.
En resumen, estos profesionales transmitieron una situación en la que, de los días que un habitante del medio rural castellano-leonés podía acudir a consulta con su médico o su enfermero:
o El 25% de esos días no pudiera atenderle bien por vacaciones, día de libre disposición o “descanso postguardia”.
o El 20% de esos días le atendiera un profesional que al mismo tiempo tenía que atender los pacientes (y desplazarse hasta los pueblos) de otro profesional que ausente y no sustituido.
o En verano y periodos festivos este problema se acrecienta.
Que esta situación ha deteriorado de manera significativa la calidad de la atención que los profesionales sanitarios y no sanitarios prestan a la población del medio rural de Castilla y León.
Que existe un importante malestar entre la población, que han manifestado a través de diferentes actos de protesta.
Ahora, en 2018, los alcaldes de La Bureba vuelven a llamar a la población a la protesta para intentar parar el progresivo desmantelamiento del sistema de salud en el medio rural.
Al término de la concentración, el alcalde de Oña se dirigió a los y las asistentes, agradeciendo la asistencia, recordando que no es la primera vez que nos encontramos en el mismo lugar con reivindicaciones similares y “ahora la Junta [de Castilla y León] nos hacen volver a salir”, “parece que nos están tomando el pelo”, “creemos que es justo lo que estamos pidiendo” y “esto no es una broma”.